Nunca sera igual

Durante la vida recorremos caminos en los que nos ha pasado de todo, alegrías, tristezas, amores y desamores, y no nos damos cuenta que todas estas circunstancias nos van marcando de tal manera, que vamos modificando nuestro actuar dependiendo de las cosas que nos vayan sucediendo.

Es normal que después de un desamor estemos en la vida con una actitud negativa o a la defensiva, pero esto estaría bien si realmente tenemos en conciencia nuestro actuar, ósea que realmente nos demos cuenta de lo que estamos haciendo o de cómo estamos actuando cuando alguien se nos acerca.

Lo que sucede normalmente es que después de una caída de la que no salimos bien librados, no tenemos la real dimensión de que tan a la defensiva estamos, y empezamos a lastimar a la gente que se intenta acercar, esto de manera inconsciente, ya que nuestra conciencia cree que la persona que se esta acercando va a ser igual o peor que las demás y esto no es así.

Nos hacemos estereotipos de la gente y creemos que estas personas van a llegar con la misma actitud o las mismas mañas que la persona con la que estuvimos antes o tuvimos relación y muchas de las veces es hasta injusto el hecho de acercarse a una persona en estas condiciones, ya que la situación se vuelve complicada porque la persona que llega, no sabe ni conoce los por-menores de la otra persona, y mucho menos si el daño que le causo su anterior relación fue trágico.

En las relaciones normalmente al comenzarlas, te enfrentas al estereotipo o como le dice la gente al tipo de persona que le gusta al chavo o chava que pretendes, y es difícil competir con el gusto de las personas ya que en muchas de las ocasiones son tan elevados los gustos que te toca competir contra Brad Pitt o en el caso de las mujeres contra Shakira o alguna otra y resulta casi una misión imposible.

Imagínate como será con una persona que ha salido de una relación tormentosa, es peor la situación, porque no solo te enfrentarías al tipo de persona que le gusta, sino de entrada te enfrentas al estereotipo que se hizo de la persona que lo haya o la haya dañado, y eso aparte de ser injusto, es más lastimoso, ya que después de salir dañados de su antigua relación, se forman la errónea idea de que todos los hombres o mujeres son iguales y luchar contra esto es peor que contra el tipo de persona que le gusta, y aparte, si sobrevives a luchar contra la mala experiencia que tuvo antes y deseas continuar, después tendrás que luchar contra su tipo de hombre o mujer, y la verdad esto es bastante cansado y casi imposible de lograr, no digo que no existan excepciones al caso, y si tu eres de las excepciones, la verdad mi reconocimiento, ya que no cualquiera logra aguantar todas estas peripecias de alguien que esta dañado.

No podría darte conclusiones de esto, la verdad me ha tocado estar en los dos lados de la moneda, y se que es difícil tratar a alguien bien cuando vas saliendo de un momento tormentoso o a la inversa acercarte a alguien que va saliendo de esa situación pedirle que te trate de buena manera es muy difícil.

Lo que si te puedo comentar es que estos estereotipos que nos hacemos después de salir lastimados son los que no nos permiten ver mas allá de nuestras narices, son los que provocan que no valoremos realmente a la gente como se merece, y esto se desencadena en que dejemos ir de nuestra vida a personas valiosas que nos pudieron haber dado tanto o mas de lo que imaginamos.

Solo puedo concluir con dos frases de dos bellas e inteligentes mujeres a las que conozco, la primera, “Dios no se equivoca”, y la segunda,” Si realmente la persona a la que pretendes o a la que quieres acercarte es para ti, el tiempo y las circunstancias se van a ir dando sin que las busques”, esto último me suena medio ilógico………………… pero creo que es verdad.

Angel de la madrugada.