Angel de la madrugada

En penumbras una vez mas, con la soledad de compañera, no puedo ya pensar
no se en que me equivoque, no se como afrontar,
este vacio interno que me consume rapidamente, sin esperanzas en mi dejar.

Va cayendo ya la noche, y a lo largo de su obscuridad,
no veo ya salida, no veo ya final
solo noto vagamente una luz lejana, a la que no puedo aspirar.

Una bocanada a mi cigarro, el cual quisiera ya dejar,
me hace ver mi vida, por mi mente pasar,
que he hecho de provecho o que he dejado de hablar.

El tiempo me consume, como ceniza en el tiempo al pasar,
pero el angel intenta hablar, decir que no me duele,
mentiria al señalar.

Solo escribo ahora, no me queda mas que dar,
el angel esta hablando, ahora debo yo callar,
lo que dice mi corazon, debe ahora perdurar

Es la hora del angel, es la hora de hablar
de encontrarme conmigo, para dejarme llevar
por los caminos caprichosos, que el quiera andar

Me gustaria algun dia, con el poder hablar,
que me extienda su mano la cual pueda yo tomar,
para sostenerme un momento, para sostenerme una vez mas,
lo extraño tanto en mi, que a veces quisiera gritar
que es lo que me pasa, me siento explotar.

Cae la noche intensa, su penumbra me envolvera,
una vez mas de esta manera, experimento soledad
vuelve el angel a mi mente, para en ella volar
surcando los cielos de mi intelecto, asi es su andar.

Me lastima mi cerebro, ya no quiero yo pensar,
que me depara el destino, alguien lo sabra?
cansado y con fastidio en la mente, por fin el angel se va
se va de madrugada, para dejarme descansar.

Algun dia por mi mente, nuevamente mi cielo surcara
ese angel de mi vida, que nunca abandonara
esa escencia que no cambia, y que nunca cambiara.

Angel de la madrugada.